miércoles, 13 de diciembre de 2017

Cifras de negocio

Las cifras de negocio se habían hundido. Me había visto obligado a despedir a casi todos los trabajadores y, si la cosa seguía así, tendría que cerrar la fábrica. Una empresa centenaria y próspera se estaba yendo a la ruina. Y todo por culpa de ese impresentable; debía pararle los pies. Tenía que hacer algo.

Me presenté ante el tribunal y le acusé de blasfemo, de rebelión, de todo lo que se me vino a la cabeza. Desde luego, tuve la precaución de no mencionar que me estaba hundiendo el negocio.

Conseguí mi objetivo. Le detuvieron, le juzgaron, le encontraron culpable y le ejecutaron. Fin del problema.

Ahora, las cifras de ventas han vuelto a repuntar: la gente vuelve a necesitar muletas. He tenido que contratar a más operarios. Desde que Jesús fue crucificado, ha crecido el número de cojos y lisiados en Judea.

Microrrelato que recibió una mención en el Certamen 132 de Las Historias