Como establecía el contrato, lo descriogenizaron el 16 de noviembre de 2117. Una vez recuperado, se reunió con el director de CryoNix, que le dio la mala noticia: todavía no había cura para su enfermedad. Sin embargo, volverían a criogenizarlo si pagaba un suplemento de quinientos mil millones de yuanes.
Microrrelato publicado en Cincuentapalabras.com