miércoles, 2 de agosto de 2017

Mal de altura

El diagnóstico médico es concluyente: su salud mejorará si se traslada a vivir a la costa. La altitud de Bogotá le matará en pocos meses. Abandonar la capital, empero, le obligaría a renunciar a la presidencia.

No le cuesta resolver el dilema. Prefiere mil veces morir presidente que vivir ignorado.

Microrrelato publicado en RELATOS EN CINCUENTA PALABRAS Y OTRAS MICROFICCIONES