sábado, 25 de abril de 2015

Por qué

No puedo evitar pensar que antes todo esto me resultaba más divertido. Añoro los viejos tiempos, cuando echaban a correr cuando me veían, gritaban, pedían auxilio. Perseguir a niños aulladores sí que era divertido. Ahora, no. Ahora, cuando me ven, se acercan. ¡Se acercan! Hasta se ríen cuando les muestro mis afilados dientes. Me hacen burla cuando les gruño. ¿Qué les pasa? ¿Por qué ahora los niños no temen a los ogros?

Microrrelato ganador del II Certamen de Microrrelatos "La breve edad del caracol"